Las extorsiones y amenazas a muerte, por parte de pandilleros, así como la falta de empleo son las principales causas que empujan a miles de salvadoreños a migran en caravana hacia Estados Unidos, según los testimonios brindados por algunos compatriotas, que pidieron omitir su nombre.
Uno de los integrantes de la primera caravana de las tres que salieron este miércoles de la plaza Salvador del Mundo, comentó que él y su nieta de nueve años fueron atacados a balazos por unos pandilleros, y que gracias a Dios no los hirieron, y que por ello decidieron unirse al grupo de migrantes.
Una mujer comentó que en El Salvador son miles de personas que, como ella, son víctimas de extorsiones por parte de pandilleros, y que esa es la razón principal por la que se vio obligada a migrar en caravana.
Un señor de la tercera edad, explicó que tomó la decisión de viajar en el grupo, porque en El Salvador no hay trabajo, mucho menos para personas como él.
La primera caravana llegó alrededor del medio día a la frontera de San Cristóbal, en el departamento de Santa Ana, mientras que otro grupo camina rumbo a la paso limítrofe de las Chinamas y la Hachadura, en el departamento de Ahuachapán, en busca del sueño americano.
Durante su paso, algunos salvadoreños expresaron su solidaridad con los compatriotas en su ruta a Estados Unidos, y les regalaron agua y artículos de limpieza, como pasta dental y papel higiénico.
Uno de esos salvadoreños solidarios es Eduardo Alvarenga, quien dijo que: «No podemos ser indiferentes ante las necesidades que están padeciendo estas personas».
Según la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) las tres caravanas que partieron este miércoles estarían integradas por lo menos con 1,350 compatriotas, entre hombres, mujeres, niños y algunas personas de la tercera edad.
