La renovación presidencial es un fenómeno electoral que existe en algunos países, este es el caso de Estados Unidos, país que encabeza la lista de los que permiten que un ciudadano que ha sido presidente pueda volver a ser elegido de forma consecutiva o por período interpuesto.
Estados Unidos sería la primera democracia moderna del mundo, mientras el resto del planeta aún tenían sistemas monárquicos y hasta imperios.
En 1787 los llamados Padres Fundadores, se reunieron para formar el Congreso Constitucional. Fueron personalidades importantes como George Washington, Thomas Jefferson, James Madison y Alexander Hamilton.
Los Padres Fundadores prefirieron no crear un gobierno que se pareciera al absolutismo, al final decidieron que fueran periodos de 4 años con posibilidad de reelección, si los ciudadanos así lo decidían, para dar continuidad al gobierno del presidente. Todos los constituyentes aprobaron el proyecto y así quedó reflejado en el Artículo Segundo de la Constitución de Estados Unidos.
En 1789 George Washington se convirtió en el primer presidente de Estados Unidos. El no queria el cargo de nuevo y aun así acepto, pues no creía estar a la altura de los retos que exigía el país. Al finalizar su mandato, aceptó la reelección para evitar divisiones políticas.
La Enmienda 22 a la Constitución de Estados Unidos ratificada en 1951 prohíbe a los presidentes de Estados Unidos ser reelegidos por más de dos mandatos. Incluso antes de 1951 la mayor parte de los presidentes seguían el ejemplo marcado por el primer presidente de Estados Unidos, George Washington, y se alejaban del poder luego de completar el segundo de sus cuatro años de mandato.