El Gobierno de España suspendió todo movimiento de personas, que no sea de fuerza mayor, salvo para ir a trabajar, comprar alimentos o medicamentos, acudir a hospitales, cuidar a ancianos o personas dependientes, informaron medios españoles.
La restricción a la libertad de circulación, para tratar de frenar el avance del coronavirus, también tendrá otras excepciones, como el regreso al lugar de residencia habitual o por otras causas de fuerza mayor debidamente justificadas, según fuentes del Ejecutivo.
Según «DW» Español, estas medidas son parte de la declaración del estado de alarma para contener la pandemia de coronavirus, y que tendrían en principio una duración de quince días, que podrán ampliarse otras dos semanas previa aprobación del Congreso.