Un importante paso en material medio ambiental dio la ciudad de Nueva York al prohibir a partir del próximo año, el uso de recipientes de espuma plástica, conocido también anime.
La medida obedece a que un tribunal determinó que los recipientes de un sólo uso no pueden reciclarse de una manera “ambientalmente efectiva, o económicamente factible”, tras una batalla legal desatada, debido a que la industria de restaurantes se oponía a la iniciativa.
Entre tanto, la alcaldía neoyorquina anunció que trabajará con los empresarios de la ciudad, para una transición hacia materiales ecológicos de bajo costo.
Las intenciones de prohibir los contenedores de poliestireno iniciaron en el año 2013, surtiendo sus efectos cinco años después.