El empresario Gustavo Salazar Lacayo Carrillo, representante legal de EDU TV S.A. de C.V., Televisión Independiente S.A. de C.V. y TV Juventud S.A. de C.V., renunció a las frecuencias televisivas: 41, 43, 45, 47, 49 y 51 (canales).
Según información proporcionada por Leonel Herrera de la Asociación de Radios y Programas Participativos de El Salvador (ARPAS), manifestó que Lacayo Carrillo es un testaferro de Telecorporación Salvadoreña (TCS).
“Dichas concesiones están relacionadas con TCS y valoramos positivamente dicha renuncia y un triunfo de nuestra lucha por transparentar y democratizar el espectro radioeléctrico”, aseguró Herrera.
Los motivos de las renuncias por parte del empresario a los derechos de explotación se dan ante las nuevas disposiciones de pagos en contribución especial extraordinaria y a la nueva tasa anual en concepto de gestión del espectro, que según ellos aumentó de 6 a 13 veces más.
Ante ello Lacayo Carrillo manifestó que no cuentan de manera inmediata de los recursos económicos y técnicos para cumplir con los requerimientos.
La concentración de frecuencias televisivas en grupos privados relacionados a las grandes televisoras del país, solo beneficiaba la conveniencia mediática, al carecer de frecuencias que sirvieran de contra parte, expresó la Red por el Derecho a la Comunicación (ReDCo), por lo cual pide a la la Fiscalía General de la República (FGR), como a la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (SIGET) retomar el “Informe final Caso SIGET-Espectro Radioeléctrico” elaborado por la Secretaría de Participación, Transparencia y Anticorrupción acerca de la adjudicación irregular de frecuencias.
El empresario Lacayo Carrillo obtuvo las concesiones a finales del periodo presidencial de Elías Antonio Saca.