Mientras Calleja llega arropado de toda la institucionalidad a filmar un spot desde la Asamblea Legislativa, en paralelo y como siguiendo un guion de Hollywood, toda la institucionalidad del país se ha logrado alinear para no permitir la participación de Bukele.
El poder fáctico de las poderosas maquinarias de los medios tradicionales de comunicación han hecho converger a los órganos Ejecutivo, Legislativo y Judicial y a gran parte del Ministerio Público e instituciones autónomas como el mismo Tribunal Supremo Electoral para cerrar todos los espacios de participación y golpear la moral de los militantes del Movimiento emergente, Nuevas Ideas.
Esto sigue el mismo patrón al que recientemente implementaron en México para intentar hacer sobrevivir a una viaja forma de vida de una clase política que vive del sistema.
La nueva pieza del ajedrez es la denuncia por «amenazas» a nuevas ideas y lograr convertirlo en un sujeto electoral sospechoso y si es posible llevar a la cárcel a Bukele.
El juicio del meme, el juicio de la manzana, el juicio a favor del exsecretario de Comunicaciones, los sendos desplegados en El Diario de Hoy, La Prensa Gráfica y Diario El Mundo, siguen un mismo patrón, son juicios acumulativos del manual que se llama “Fake Laws”.
