Para nadie es un secreto que El Salvador antes de la llegada del Gobierno del Presidente de la República, Nayib Bukele, acaparaba titulares a escala internacional por ser el país más peligroso del Hemisferio Occidental, hoy en día, extensos artículos periodísticos y portadas de prestigiosos medios destacan la seguridad del país, que lo ha convertido en el país más seguro de Occidente.
Enrique Valtierra, nos relata a través de su propio escrito como El Salvador pasó de ser el país más peligroso al más seguro: «El Salvador hasta 2019: El país más peligroso de Occidente. El Salvador en 2024: El país más seguro de Occidente. ¿Qué paso? Y… ¿Por qué tantos políticos odian al hombre responsable?».
Valtierra hizo un resumen de la situación del país en el pasado, recalca que en la década de los 80, la guerra civil entre el Ejército y la extinta guerrilla, hizo que muchas personas huyeran a California, Estados Unidos, donde se formaron las temidas pandillas Barrio 18 y la MS-13.
Cuando estos pandilleros fueron deportados a El Salvador, se fortalecieron con el reclutamiento de más jóvenes, quienes obligaron a sencillos vendedores hasta grandes empresas a pagarles la extorsión, mal llamada «renta», conllevando al asesinato indiscriminado de inocentes, incluso dejando más muertos que la misma guerra civil.
En 2019, con solo 37 años, Nayib Bukele fue elegido Presidente de El Salvador, convirtiéndose en el Mandatario más joven, en la historia del país, causando crítica por parte de sus detractores por su supuesta «inexperiencia».
Sin embargo, la historia dio un giro histórico, con la implementación del Plan Control Territorial, Bukele otorgó a las fuerzas de seguridad la vía legal para atrapar a todos los pandilleros de El Salvador, logrando varias jornadas con cero homicidios, una hazaña impensable en los gobiernos de ARENA y FMLN.
Sin embargo, las pandillas intentaron arrebatar la seguridad y paz que se había logrado hasta ese momento, provocando una matanza histórica, en marzo de 2022, fue entonces, que el Gobierno de Bukele, sin tapujos declaró un Estado de Excepción que está vigente hasta hoy en día.
A diario más de 1,000 pandilleros eran arrestados, que estaban viviendo una vida «normal» en las escuelas, el trabajo, en las comunidades, pese a todo el daño hecho a la sociedad salvadoreña, ante la masiva detención construyó el Centro del Confinamiento del Terrorismo (CECOT), la mega cárcel que alberga a miles de peligrosos terroristas y que ha inspirado a otras naciones.
Bukele no ha estado exento de la crítica de organismos nacionales e internacionales defensoras de los derechos, que alegan violación del debido proceso, sin embargo, el país ahora es el más seguro del Hemisferio Occidental y el octavo del globo terrestre.
