Contrario a diferentes medios de oposición que se dedicaron a desinformar a la población, el día de ayer se confirmó que El Salvador cuenta con la suficiente liquidez para cumplir con sus obligaciones fiscales.
El anuncio fue dado por el Presidente de la República, Nayib Bukele, quien envío dos proyectos de ley que contienen una medida para asegurar los fondos «para hacer una oferta de compra transparente, pública y voluntaria» a todos los tenedores de bonos de deuda soberana salvadoreña desde 2023 hasta 2025.
Ante ello, los diputados de la Asamblea Legislativa aprobaron ambos proyectos. La primera de las iniciativas admitidas por 66 legisladores es el Decreto Especial y Transitorio para Autorizar al Banco Central de Reserva el Traslado al Ministerio de Hacienda del Monto, en Dólares de los Estados Unidos de América, Equivalente a 275 Millones de Derechos Especiales de Giro.
Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), los Derechos Especiales de Giro (DEG) son un activo de reserva internacional creado en 1969 para complementar las reservas oficiales de los países miembros. Los DEG se pueden intercambiar por monedas de libre uso.
La segunda iniciativa, avalada con 66 votos, es la suscripción de un préstamo de $200 millones con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
El mandatario afirmó que el país tiene suficiente liquidez «no solo para pagar todos sus compromisos a su vencimiento, sino también para comprar su propia deuda (hasta 2025), por adelantado», dijo, y a la vez reprochó que algunos sectores sostengan que El Salvador está cayendo en default.
Cabe mencionar que luego del anuncio del Jefe de Estado, los bonos de El Salvador se encuentran tasando en 50 centavos por dólar, un alza considerable ya que se encontraban cerca de los 30 centavos por dólar, según estableció el vicepresidente de la firma Exor Latinoamérica, César Addario.