Según una investigación del periódico digital El Faro, el gobierno del mandatario, Salvador Sánchez Cerén, mantiene en secreto el uso de $147.96 millones en los cuatro años que lleva su mandato. La administración actual se ha negado a transparentar su uso público.
La partida secreta del Estado es una cuenta de gastos reservados, que según la información del Faro, es la tercera más grande de los últimos 25 años. Solo la superan la de Antonio Saca (2004-2009) y la de Mauricio Funes (2009-2014), los dos expresidentes acusados de peculado y lavado de dinero por el uso discrecional y sin el consentimiento de la Asamblea Legislativa.
Se dice que Sánchez Cerén copió el mecanismo que usó Funes. El primero consiste en hacer recortes internos del presupuesto de Presidencia y ubicar ese dinero en los gastos reservados, para mantenerlo lejos del escrutinio público.