El incremento en la cantidad de casos y hospitalizaciones en Estados Unidos hace creer que el país esté entrando en una segunda ola de coronavirus, tras el levantamiento de las restricciones impuestas para frenar la pandemia.
Los estados de Florida, Texas, Arizona y California informaron un repunte en los casos confirmados y hospitalizados por la COVID-19, esta ola tendría efectos muchos más graves para la población que los que sufre ahora.
La primera ola de coronavirus ya ha matado en Estados Unidos, a más de 113,000 personas, con lo que el sistema sanitario se ha visto sobrepasado y se ha evidenciado la gran escasez de kits de prueba, ventiladores y equipos de protección para los trabajadores de la salud.
Expertos en salud les preocupa que pueda haber un mayor aumento de las infecciones como consecuencia de las protestas nacionales por las injusticias raciales y la brutalidad policial que aglutinaron gente desde hace dos semanas.