Al menos 17 personas murieron y decenas resultaron heridas entre el pasado viernes y el sábado en Manabí y Guayaquil, Ecuador, a causa de masacres violentas, a pesar de que en el país sudamericano sigue vigente el Estado de Excepción impuesto desde enero.
La Fiscalía General de Ecuador abrió la investigación para dar con los autores de los crímenes. Hasta ayer, la Policía Nacional no informó sobre detenciones.
Actualmente, Ecuador vive una crisis de violencia a causa de las bandas criminales que se disputan a sangre y fuego las rutas del narcotráfico. El ciclo de violencia ha provocado un aumento de la tasa de homicidios, que pasó de 6 por cada 100,000 habitantes en 2018, al récord de 43 en 2023.