El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, anunció el sábado que se autoriza el porte y tenencia de armas de uso civil para defensa personal, tras un aumento de la inseguridad en el país, sin embargo, las medidas han generado una gran polémica.
«Ecuatorianos, tenemos un enemigo común: la delincuencia, el narcotráfico y el crimen organizado», dijo Lasso en un mensaje televisado antes de anunciar la modificación del decreto que regula el uso de armas para autorizar que los civiles puedan tener y portar armas y utilizarlas para su defensa personal, así como el uso de aerosoles de gas pimienta con el mismo fin.
Las medidas, suceden un día después de que en Guayaquil a un hombre le fueron adheridos explosivos a su cuerpo en una suerte de chaleco improvisado durante varias horas hasta que la policía pudo retirárselos y desactivarlos.
El viernes, también fue hallado muerto en la población de Punta Blanca, en una de las zonas de playa más cercanas a Guayaquil, un sospechoso en una trama de corrupción que rodea al propio mandatario.