La investigación realizada por la Fiscalía General de la República (FGR), reveló que el gobierno de Sánchez Cerén pagó $400 mensuales a 16 pandilleros durante dos años, como retribución al apoyo y colaboración de estas estructuras delictivas al partido FMLN por haber ganado las elecciones presidenciales de 2014.
Según la información fiscal, el testigo criteriado «Noé», delató que el exministro de Gobernación, Arístides Valencia había ofrecido los salarios, además de un taller de zapatería y un carné para evadir a la PNC.
«Le hicieron ver al señor Arístides Valencia que ellos ya habían cumplido con hacerlos ganar la presidencia de la República y querían que les cumplieran las promesas que les habían hecho en la campaña electoral», se lee en la acusación que la FGR presentó ante el Juzgado Segundo de Paz de San Salvador contra ocho políticos y excolaboradores por supuestos pactos con pandillas para obtener apoyo electoral en 2014 y 2015.