Este miércoles, alrededor de las siete de las siete de la noche hora local, dos terremotos, uno de magnitud 5.4, y, otro de 6.2 registrado dos horas después del primero, sacudió las tierras de Italia.
El epicentro fue registrado en la provincia de Macerata, ubicada en la región de Las Marcas, y, fue percibido en localidades como Roma, L’Aguila, Perugia, Terni e, incluso con menos intensidad, en Florencia y Nápoles.
Las autoridades italianas aun no tienen noticias de víctimas a causa del movimiento telúrico. No obstante, persiste el miedo por las zonas afectadas, puesto que las líneas eléctricas se han caído en algunas áreas golpeadas por los sismos y se han registrado algunos derrumbes.
Es de mencionar que esto nuevos temblores de tierra se han producido dos meses después que, el pasado 24 de agosto, un sismo de magnitud 6.0 cobrara la vida de 297 personas, en las localidades de Amatrice, Accumoli, Aquarta del Tronto y el centro de Italia. Algunos expertos han afirmado que el desastre de esta noche esté ligado al terremoto de agosto, y, por consiguiente, es probable que se haya activado una nueva falla.
