El número de accidentes de tránsito y la contaminación galopante que genera las viejas flotas de autobuses del transporte colectivo es un tema sentido por los salvadoreños, y el Director del Fondo Ambiental de El Salvador (FONAES), Jorge Koky Aguilar, ha vuelto a poner “el dedo en la llaga”.
“El aire que respiramos está cada vez más contaminado y la amenaza va en aumento. Debemos detenerla comenzando por una renovación del transporte colectivo”, sugirió el funcionario en su cuenta de twitter.
En una publicación pasada, Aguilar, fue enfático en que el incremento de enfermedades respiratorias, (casi 30 mil casos de neumonía a la fecha), la generan los buseros del transporte colectivo.
Según los últimos reportes de monitoreo del aire en Área Metropolitana de San Salvador, publicados por el Ministerio de Medio Ambiente, circula en el ambiente material particulado menor a 2.5 micrómetros de diámetro lo que le permite acceder con facilidad a los pulmones.
La fina materia particulada “es producida por la combustión de motores ineficientes y combustibles sucios como el diésel”.