La Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA) presentó irregularidades al adjudicar el proyecto de ampliación del Aeropuerto Internacional El Salvador Monseñor Óscar Arnulfo Romero a la firma mexicana Caabsa Constructora, pese a que había una gran diferencia entre la lista de materiales que establecía el plan de oferta económica, a las que se necesitarían para concluir la obra y que ello ponía en riesgo los alcances del proyecto.
La obra actualmente está sin avance, esto fue expuesto por la agencia que está a cargo de la supervisión de la obra, Oficina de Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), mediante un informe que indica que la CEPA ya conocía sobre esos “faltantes”, ya que la obra inicialmente estaba presupuestada en $37 millones y que debido a las anomalías se desembolsó $3.7 millones extras, haciendo un total de casi $41 millones en total.
El presidente de CEPA, Nelson Vanegas, reconoció que había retrasos en la ejecución de los trabajos y que la misma no sería entregada este mes como estaba previsto, sin embargo argumentó no saber nada de las irregularidades entre la licitación y el proyecto actual que ha generado un desembolso millonario que perjudicaría las finanzas del próximo Gobierno entrante.