El criminólogo, Ricardo Sosa, confirmó que desde la gestión del Gobierno del Presidente de la República, Nayib Bukele, El Salvador ha dejado de ser un destino ideal para las estructuras internacionales del crimen organizado.
«La incautación de 200 kilogramos de cocaína, ha sido un logro importante durante los dos años años de implementación del Plan Control Territorial. Para un narcotraficante, un decomiso, sin importar su tamaño, es un golpe a la moral. La estructura criminal pierde su optimismo de enriquecerse», dijo el experto.
Asimismo aplaudió el trabajo en conjunto que realiza la PNC, FGR y la FAES, para dar un duro golpe al narcotráfico. Añadió que «el dinero que circula alrededor del narcotráfico genera otros delitos como la trata de personas y el tráfico de armas».