A partir del próximo lunes 10 de agosto, el Gobierno de Costa Rica decidió relajar las medidas preventivas que se habían tomado para contener al Coronavirus, la decisión se tomó a pesar que el país se encuentra en su momento de mayor contagio.
El relajamiento se da luego de la presión de empresarios y alcaldes que reclaman más espacio para las actividades económicas, a pesar que el país centroamericano sobrepasa los 22,000 contagios y 200 muertos por COVID-19.
A partir de mañana, podrán operar supermercados y abastecedores, mientras que restaurantes, cafeterías, tiendas, barberías y salones de belleza funcionarán con límite de personas, asimismo, se redujo el horario de restricción vehicular.