La consultora internacional Duff & Phelps B.V. (Duff & Phelps) será el Agente de Monitoreo que dará seguimiento al cumplimiento de los compromisos asumidos por Anheuser-Busch InBev SA/NV (AB InBev) para adquirir a SABMiller plc (SABMiller) en el mercado salvadoreño, entre ellos la venta de las marcas de cerveza Regia Extra y Suprema.
La Superintendencia de Competencia juramentó a la consultora en un acto celebrado el pasado 6 de febrero, cuando Duff & Phelps aceptó el cargo de monitor y se comprometió bajo juramento a verificar el proceso de cumplimiento de las condiciones y obligaciones de AB InBev.
Entre las condiciones que deberá verificar Duff & Phelps están asegurarse de que la venta de Suprema y Regia sea íntegra, así como mantener los volúmenes de producción y el valor comercial de las marcas durante el proceso de la venta, y también mantener las garantías laborales del personal de Industrias La Constancia (ILC), subsidiaria de SABMiller en El Salvador.
Duff & Phelps informará al Consejo Directivo de la Superintendencia de Competencia (CDSC) respecto de la idoneidad del potencial comprador de estas marcas de cerveza para cumplir con los objetivos previstos en la resolución que condicionó la fusión entre SABMiller y AB InBev. El CDSC evaluará que el comprador propuesto sea el apropiado para impulsar una competencia efectiva en el mercado.
“Las credenciales de Duff & Phelps, firma consultora internacional independiente, muestra su experiencia en procedimientos de desinversión. El CDSC la valoró como la mejor opción para garantizar el cumplimiento de los condicionamientos a la concentración económica en el mercado de las cervezas”, declaró Francisco Díaz, titular de la SC.
En octubre del año pasado, las dos mayores cerveceras del mundo, SAB Miller y AB InBev, concretaron su fusión. SABMiller opera en El Salvador a través de ILC, dueña de las marcas Pilsener, Golden, Regia y Suprema.
En febrero de 2016, estas empresas pidieron autorización a la SC para su concentración económica y en agosto la institución resolvió que era necesario ordenarles una desinversión, pues de aprobar la fusión sin condiciones se generaría un casi monopolio en el mercado nacional de la cerveza.
El 1 de diciembre pasado, AB InBev presentó a la Superintendencia un plan de desinversión que contempla la venta de las marcas Regia y Suprema, ésta última en sus tres presentaciones, Clásica, Roja y Negra.
El plan de desinversión de AB InBev fue anunciado el 12 de enero pasado por la Superintendencia.