El gobierno de China, anunció que empezarán a experimentar con la prueba del COVID-19 con 108 pacientes voluntarios de Wuhan, ciudad de China donde se detectó el virus antes de esparcirse por el mundo.
Las edades de los voluntarios rondan entre los 18 y los 60 años de edad, quienes accedieron a que se realizasen prueban en ellos con el objetivo de conseguir la primera vacuna que trate la pandemia que tiene a más de la mitad de los países del mundo en cuarentena total.