La Fiscalía General de la República (FGR) admitió, tal y como ya lo han denunciado los señalados, ha extraviado supuestas pruebas claves para el juicio «meme».
De acuerdo con las pruebas se perdieron en una de sus sedes fiscales, específicamente la del municipio de San Marcos y habrían desaparecido en julio de 2016.
Se presume que el responsable habría sido un vigilante de una empresa de seguridad contratada por la FGR para cuidar el lugar quien tomo las pruebas (una computadora y un teléfono celular).
Según las autoridades sí se le dio seguimiento al caso y se logró culpabilizar al vigilante por el hurto de las presuntas pruebas que iban a ser añadidas al proceso judicial.