Tras el desborde de contagios del COVID-19, el gobernador de California, Gavin Newson, ordenó este lunes el cierre de bares, discotecas, iglesias, salones de belleza, gimnasios y restaurantes que no estén al aire libre.
California junto a Florida, Arizona y Texas se han convertido en los nuevos epicentros de la pandemia en Estados Unidos, por lo que el uso de mascarilla es de carácter obligatorio para frenar los contagios.