Representantes del Banco Mundial (BM) advirtieron este viernes de una situación económica “muy crítica” en Nicaragua, que vive desde abril debido a la inestabilidad política y social que ha debilitado su crecimiento.
Según cifras, tras un crecimiento de 4,9% en 2017, el BM prevé para este año una severa contracción de 3,8% en Nicaragua, una caída tan pronunciada que restará 0,4% a la expansión de Centroamérica, apuntó el reporte.
La situación del país decayó, luego que multitudinarias protestas estallaron el 18 de abril en contra de una fallida reforma al sistema de pensiones, pero tras una violenta represión del gobierno y grupos armados afines se transformaron en una demanda por la salida del poder del presidente Daniel Ortega.
Jorge Familiar, vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, expresó la preocupación del BM por el efecto negativo de esta situación en el combate a la pobreza en uno de los países de por sí más pobres del continente.
“El origen del problema, que es político y social, va más allá del mandato del Banco, pero esto claramente tiene un impacto económico”, dijo.