El pasado sábado 24 de diciembre, el Gobierno del Presidente Nayib Bukele dio inicio a la instalación de cercos militares en dos comunidades de San Salvador, históricamente reconocidas por la narcoactividad y cometimiento de ilícitos, para proceder con la Fase 5 del Plan Control Territorial, denominada Extracción, y que busca sacar a criminales de las calles del país.
En horas de la madrugada del sábado 24, las autoridades cercaron la comunidad Tutunichapa, y horas más tarde replicaron la medida en comunidad La Granjita, ambas de San Salvador, y conocidas por ser los centros de distribución de droga en la capital.
«Desde esta mañana, la comunidad Tutunichapa, en San Salvador, está totalmente cercada. Sin remover un solo elemento del cerco de Soyapango, más de 1,000 soldados y 130 agentes de la Policía, extraerán a los criminales que aún quedan en esta comunidad, famosa por el narcotráfico», destacó el Presidente Nayib Bukele a primera hora el sábado.
«Luego de cercar la Tutunichapa, famoso centro de distribución de droga, sabíamos que muchos narcotraficantes irían a abastecerse a la comunidad La Granjita, otro famoso centro de distribución. Lo que no esperaban es que cercaríamos La Granjita, una vez estuvieran adentro», agregó el Mandatario horas más tarde.
Hasta el cierre del 25 de diciembre, las autoridades registraban 432 extracciones de personas vinculadas a las estructuras criminales o de distribución de droga, en ambas comunidades.
En la comunidad Tutunichapa se han desplegado 1,132 elementos de seguridad pública, y 1,100 más en La Granjita.