Hasta con $20,000 de saldo en su teléfono, han poseído los reos en sus teléfonos, por lo cual tiene minutos de sobra para realizar cualquier tipo de llamada que deseen.
Esta práctica no es nueva, ya que en el año 2016 se dio el caso de un pandillero que tenía en su teléfono celular dicha cantidad, por lo que las autoridades correspondientes procedieron al decomiso del aparato.
Lo anterior, pone en evidencia que las compañías telefónicas siguen con la práctica de brindar señal a los celulares, lo que a la postre significa que desde estas, los cabecillas de pandillas puedan comunicarse con los pandilleros del exterior, para atentar contra la integridad de los salvadoreños.
Investigaciones revelan que el 80% de los delitos que cometen las pandillas, provienen de las órdenes que emiten sus cabecillas desde las cárceles.