A partir del lunes, las restricciones de salida se aplicarán nuevamente a todos los austriacos, en un nuevo confinamiento que durará 20 días y con el que las autoridades pretenden poner freno a la más contagiosa de todas las olas de la pandemia hasta el momento.
El gobierno de Viena acaba de anunciar además que todos los residentes tendrán que vacunarse obligatoriamente a partir de febrero, convirtiendo así al país en el primero europeo en obligar a vacunarse.
«Hemos adoptado una decisión muy difícil obligados por las circunstancias, nos vemos forzados a adoptar una vacunación obligatoria», ha declarado el canciller Alexander Schallenberg, quien añadió que «a pesar de meses de persuasión, no hemos podido convencer a suficientes personas para que se vacunen».
Desde el lunes, Austria vivirá su cuarto cierre nacional, después de que cuatro cantones hubiesen anunciado por su cuenta el cierre en sus territorios. Tres semanas después, si las cifras de contagios lo permiten, terminará el cierre generalizado, pero continuarán las restricciones para las personas no vacunadas, además de mantener el uso obligatorio de la mascarilla en todos los niveles escolares.
Estas medidas se toman debido al alto número de contagios registrados en los últimos días, además de que el país tiene los números más bajos de vacunación en Europa Occidental.
Muchos otros países de la región están imponiendo restricciones debido al aumento de los casos.
«No queremos una quinta ola», dijo Schallenberg después de reunirse con los gobernadores de las nueve provincias de Austria en un centro turístico en el oeste del país.
Covid-19: Austria vuelve a ordenar el confinamiento total y hace obligatoria la vacunación https://t.co/vK7jjiSouX
— BBC News Mundo (@bbcmundo) November 19, 2021