La NASA lanzó el jueves por la noche una sonda espacial llamada OSIRIS-REx para perseguir un asteroide oscuro y potencialmente peligroso llamado Bennu. La sonda tomará una muestra del asteroide y, en una novedad para el programa espacial de Estados Unidos, la traerá de vuelta a la Tierra.
“¡La NASA lo hizo de nuevo!”, dijo Jim Green, director de la División de Ciencia Planetaria de la agencia espacial, durante una reunión tras el lanzamiento.
“Esta noche es una noche para celebrar”, dijo Ellen Stofan, científica de la NASA. “Vamos en camino a un asteroide”.
La sonda OSIRIS-REx despegó a las 7:05 pm ET desde Cabo Cañaveral en la punta de un cohete Atlas V de United Launch Alliance. “Nuestra nave @OSIRISREx está en camino y todo va de acuerdo al itinerario”, tuiteó la NASA.
Los encargados de la misión dijeron que el lanzamiento había sido sin contratiempos, que la nave está en excelentes condiciones y que la misión está cumpliendo con todos sus objetivos iniciales.
“La OSIRIS-REx está feliz y saludable”, dijo Rich Kuhns, director del programa en Lockheed Martin Space Systems, la empresa que construyó la nave.
El investigador principal de la misión, Dante Lauretta, dijo que el próximo gran momento será ver el asteroide Bennu por primera vez desde la OSIRIS-REx.
“Todos en el equipo tienen una imagen en sus cabezas de cómo se verá Bennu y será genial verlo como es en realidad”. Esas imágenes comenzarán a llegar dentro de unos dos años, cuando la sonda se vaya acercando al asteroide.