El arzobispo de San Salvador, monseñor José Luis Escobar Alas, sostuvo su desacuerdo en que la población civil se arme para crear grupos de autodefensas, para hacerle frente al flagelo de la inseguridad, provocado principalmente por las pandillas.
«Las armas solo deben estar en manos de las autoridades», remarcó el líder religioso, de lo contrario solo se propiciaría más enfrentamiento y por consiguiente un recrudecimiento de la violencia.
Con sus declaraciones el líder de la iglesia católica salvadoreña, aclaró que sus palabras no van en torno a descalificar o contradecir los argumentos de algún funcionario público en específico, sin embargo, es de la opinión que la creación de grupos de autodefensa es contraproducente.
Esta semana trascendió la noticia, que el presidente de la Asamblea Legislativa, Guillermo Gallegos, donó dinero a habitantes de la comunidad San José de La Montaña, en Zacatecoluca, La Paz, para que pudieran cumplir con el correcto procedimiento para legalizar sus armas y poder montar un grupo comunal de protección contra la criminalidad.
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