ARENA y el FMLN experimentaron ayer una derrota sin precedentes en las urnas, reflejando el rechazo continuo de la población debido a su histórico pasado de corrupción y negociaciones con pandillas, como advirtieron las encuestas.
Joel Sánchez y Manuel Flores, al votar sin los colores partidarios y sin la presencia de la dirigencia, evidenciaron un cambio radical respecto a sus épocas de influencia política, emitiendo su voto en Antiguo Cuscatlán y Quezaltepeque, respectivamente.
Para ARENA, esta derrota marca el cuarto rechazo consecutivo, mientras que el FMLN enfrenta su segunda derrota electoral consecutiva en su intento por volver al Gobierno. Ambos partidos también sufrieron su segunda derrota legislativa consecutiva, perdiendo el control hegemónico que mantuvieron en el Congreso, lo que bloqueó las iniciativas de Nayib Bukele desde el Ejecutivo durante dos años.