Una interrupción masiva en Microsoft y CrowdStrike ha paralizado sistemas de TI a nivel mundial, afectando a servicios críticos como el 911 en EE.UU., aerolíneas, bancos y medios de comunicación. Esta interrupción global ha causado retrasos en vuelos y problemas en empresas de radiodifusión y servicios de trenes en países como EE.UU. y España.
El Financial Times informa que expertos en seguridad consideran este fallo como «la mayor interrupción de tecnología de la información de la historia». Miles de usuarios han perdido acceso a plataformas de computación en la nube y servicios de Microsoft 365, enfrentando la ‘pantalla azul de la muerte’.
El apagón comenzó en Australia y se extendió rápidamente a Europa, EE.UU. y Asia. Pese a la magnitud del problema, las autoridades no lo están tratando como una amenaza de seguridad cibernética, según Reuters.