A pocos días de que finalice el año, el alcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt, sigue sin reponer la bandera que fue removida del redondel Masferrer tras sufrir daños por leves vientos que registró el país.
Dicha colocación de la bandera ha sido criticada por los salvadoreños ya que el precio se aproxima en $300,000, dejando a un lado otras prioridades como la pandemia del COVID-19 y la crisis de la basura en la capital.
A pesar del gasto excesivo en la obra, Muyshondt ha reclamado al Gobierno por no tener dinero para el pago de servicios y propaganda por ello, ha exigido que se le transfiera el FODES sin importarle la salud del pueblo.