Cien días después de su muerte y aunque Cuba ha limitado por ley el uso de su nombre e imagen, la figura de Fidel Castro está más presente que nunca en la isla, donde el fervor hacia el exmandatario comienza a cobrar proporciones mesiánicas que llegan incluso hasta la comparación con Jesucristo.
Fidel Castro falleció el pasado 25 de noviembre. Su hermano Raúl dio la noticia oficialmente y afirmó que su cuerpo sería cremado por voluntad del propio líder revolucionario. Apenas anunciada su muerte, los principales líderes mundiales expresaron sus condolencias a los familiares del comandante y a todo el pueblo de Cuba.
El pueblo cubano salió masivamente a las calles de la capital para ser testigos de la caravana que transportó a su líder, siguiendo la famosa ruta de la Libertad de 1959, año en que triunfó la Revolución Cubana, pero esta vez, en sentido inverso.
Los últimos años de la vida de Castro estuvieron marcados por su ausencia en la actividad política de su país. Se limitaba a recibir a sus invitados en su residencia ubicada en la capital cubana. Castro se retiró oficialmente de la política en 2006, año en que su hermano Raúl, segundo secretario del Partido Comunista cubano, tomó el mando del país. Posteriormente, en 2008, Raúl Castro fue elegido como presidente de Cuba y se mantiene en el cargo hasta la fecha.
El 23 de agosto de 2016, el líder de la Revolución había cumplido 90 años de vida. La última aparición en público de Fidel Castro la hizo junto al presidente vietnamita Tran Dai Quang, durante una visita que realizara éste
