Fallece Héctor Sermeño, exdirector de patrimonio cultural de CONCULTURA

Por Redacción UH

Este sábado, falleció el escritor, historiador y ensayista salvadoreño Héctor Ismael Sermeño, quien fungió como director de patrimonio cultural del extinto Consejo Nacional de Cultura (CONCULTURA) hasta 2009.

El nacido en Chalchuapa en 1954, destacó como promotor cultural y se desempeñó como presidente de la Fundación Cultural Alkimia, asimismo, fundó “Los Miércoles de Poesía”, actividad literaria que la institución desarrollaba en el restaurante Los Tacos de Paco.

Ante la sorpresiva noticia, la secretaria de Cultura Silvia Elena Regalado expresó su tristeza por el fallecimiento de Sermeño. «Héctor ha sido para mí un queridísimo y admirado amigo. Un intelectual inmortal. Me sorprende su muerte porque él es de esas personas a quiénes quieres vivas siempre. Me duele muchísimo y te abrazo compartiendo tu dolor», escribió.

«Por tu genialidad fuiste amado y odiado», reza el escrito de la funcionaria en sus redes sociales.

No obstante, a pesar de su reconocida trayectoria, Sermeño estuvo en el ojo del huracán. En el año 2011, fue condenado a prisión luego de dañar un sitio arqueológico catalogado “de primer orden”.

El historiador, bajo el cargo de director de patrimonio cultural, autorizó la construcción de una residencial en el recinto arqueológico  El Cambio, ubicado en San Juan Opico, La Libertad.

Sermeño  fue capturado el 28 de septiembre de 2010 y fue acusado de actos arbitrarios, complicidad y daños agravados por la destrucción de un sitio arqueológico. Un año después, el 5 de julio de 2011, el Juzgado Tercero de Sentencia de San Salvador lo condenó a tres años de cárcel, sustituidos por 144 jornadas de servicios de utilidad pública, así como a pedir disculpas públicas.

La lotificadora era propiedad del empresario Mario Sol Bang, quien también fue procesado por iniciar las obras en terreno protegido, y posteriormente absuelto por la Sala de lo Penal de los $35 mil que había sido condenado a pagar.

Sermeño cumplió su condena y pidió disculpas públicas a través de una publicación en un rotativo nacional en diciembre de 2012.