Desafíos del joven Nayib, la coyuntura pre-electoral (Segunda Parte)

Por Redacción UH

Por: Mario Cabrera

Lo antes dicho, trae consigo anticuerpos y adhesiones, para el “joven Nayib”, pero no se debe tener miedo a las críticas, si son razonables hay que ser humildes, autocríticos y rectificar. Tan solo el hecho de participar en el debate con la dirección del FMLN, le permite al “joven Nayib” incidir políticamente, introduciendo la idea, no solo de ganar elecciones, sino que lo importante que es, la creación de nuevas circunstancias políticas, para obtener resultados diferentes y no continuar con más de lo mismo.

Situación que obliga al FMLN a comprometerse con:

1. Aceptar al “joven Nayib” como líder del partido y como su candidato presidencial, aceptando alma corazón adentro, sin reserva alguna que ha llegado el momento, de abrir espacio a las nuevas  generaciones.

  1. Que para dirigir e iniciar un proceso político de nuevo tipo, es urgente, una reingeniería de autocrítica y actualización del pensamiento individual y colectivo, estar a la altura de las situación política y construir la nación que la mayoría de ciudadanos salvadoreños anhelamos.
  2. Que a 25 años de la firma de los Acuerdos de Paz, del inicio de la Post-guerra, del proceso democrático y de la paz, es tardío, plantearse el inicio del fomento de una cultura de paz, cuando los mismos actores de esa firma, ARENA (Cristiani) y FMLN (excomandancia general) lo han malogrado. Si esa línea política de “fomentar la cultura de la paz, se hubiera impulsado a partir de febrero de 1992. “En otra situación, estaríamos viviendo los salvadoreños”.
  3. Que se elabore estrategia política, de organización y de alianzas, incorporando cuadros idóneos y líderes naturales en los diferentes poderes. Acompañados de un programa mínimo de transformaciones fundamentales y de cambios reales.
  4. Elaborar las políticas públicas para transformar la realidad del país, en los componentes, fundamentales y esenciales tales como los: ideológicos, económicos, políticos, sociales, culturales y científicos.
  5. Iniciar un proceso de apertura democrática y reconversión estratégica, al interior del partido, generando condiciones para nuevos cuadros, liderazgos naturales, tal como se han generado en San Salvador, San Miguel y otras alcaldías.
  6. Salir de ese proceso de inseguridad pública, dejando de favorecer a unos y atacando a otros, impartiendo justicia a todos por igual.
  7. Terminar con la guerra sucia, desmarcándose de la plaga que corrompe, que los hace caer en la impunidad, con madures y voluntad política, derrotando aquellos intereses políticos individualistas y sectarios.
  8. Crear políticas de Concertación, Dialogo, Negociación y reconciliación, respetando acuerdos, no seguir desmoralizando al pueblo con el quebrantamiento de “la palabra de honor”, de la violación de acuerdos, de irresponsabilidad y cinismo. No se debe, ni se puede seguir echando la culpa unos a otros, poniendo en práctica venganzas que traen consigo, más odio entre nuestro pueblo, dañando el futuro de las nuevas generaciones.
  9. Madurar políticamente, unos en la oposición, otros en el órgano ejecutivo, en el legislativo, en el judicial o en el ministerio público. No seguir manoseando e irrespetando el voto ciudadano, quien es quien elige a sus servidores.
  10. Rectificar errores de hechos sucedidos, antes y después de la firma de los acuerdos de paz, con voluntad y admisión de las mismas políticas equivocadas, que están llevando al país, a una polarización política sin fin.

12.Hay que construir una nueva estrategia electoral de mediano y largo plazo, desmarcándose de todo lo que daña al pueblo que asegure una victoria, en el 2018 y 2019, con un programa de gobierno,  con agenda de país, con una clara política de alianzas,  no permitiendo que nadie por muy poderoso que sea, este sobre los derechos ciudadanos.

Con estos compromisos adquiridos por la dirección del FMLN, junto a liderazgos como el suyo, debemos estar seguros “joven Nayib” que su gobernabilidad será exitosa, para beneficio de nuestro pulgarcito.